Per sucar-hi pa, gastronomía y viajes: Appeltaart

Uno de los mejores recuerdos de nuestro paso por Amsterdam es sin duda esta Appeltaart, presente en la mayoría de cafeterías de la ciudad y del país, y siempre dispuesta a ofrecer energía y relax al viajero agotado.

Una fina y quebradiza masa (sucrée), envuelve un generoso relleno de manzanas, aderezado en este caso con algunas frutas deshidratadas (pasas, arándanos), limón, canela y ron.

El resultado es de llorar cuando se acaba ... o ir corriendo a preparar otra :)

Appeltaart, la tradicional tarta holandesa de manzana.

Ingredientes

Para la base de masa sucrée

250 g de harina
150 g de mantequilla pomada
1 huevo
100 g azúcar glass
30 g de harina de almendra
1/2 cucharadita de canela

Para el relleno

3/4 manzanas granny smith
zumo de medio limón
2 cucharadas de pasas
2 cucharadas de arándanos secos
2 cucharadas de pan rallado
1 cucharada de maicena
2 cucharadas de ron (opcional)

Preparación

La masa sucrée

Mezclar la mantequilla, cortada a daditos y a temperatura ambiente (pomada), junto con el azúcar glass y la almendra hasta que se integren bien.

Añadir el huevo e incorporarlo poco a poco a la mezcla anterior.

Añadir la harina tamizada y mezclar con una espátula dura, eso nos ayudará a que quede todo integrado. Mezclar lo justo para que todo quede incorporado.

Hacer una bola con la masa, envolver con film plástico y reservarla en la nevera al menos 30 minutos.

Con 2/3 partes de la masa forraremos el molde y el 1/3 restante haremos la tapa.

Para estirarla, colocar la masa entre dos hojas de plástico y presionar con el rodillo, hasta obtener una pieza lo más fina posible. Una vez estirada volver a ponerla en la nevera el tiempo suficiente para que endurezca un poco, unos 30 minutos, o bien en el congelador si tenemos prisa.

Una vez tenga la consistencia deseada, retirar el plástico y con el aro del molde marcar la base de masa para forrar el molde, que previamente habremos untado con mantequilla. Con ayuda de una regla y un cortador o cuchillo cortaremos un par de piezas para las paredes de la tarta. Con los sobrantes de masa hacer un cordoncillo para unir bien la base y los laterales.

El relleno

Precalentar el horno a 180º

Pelar y cortar las manzanas colocarla en un bol y rociar con el zumo de limón. Añadir la maicena, la canela, las pasas, los arándanos y el ron (opcional). Mezclar bien todos los ingredientes para que se distribuyan uniformemente.

Esparcir sobre la base de la tarta el pan rallado, ayudará a absorber el exceso de humedad de la mezcla sin ablandar la masa. Rellenar con la mezcla de manzanas hasta el borde del molde.

Con la masa reservada hacer un círculo para la tapa sobre una hoja de papel de horno. Aquí hemos optado por marcar (sin cortar!) pequeños cuadrados sobre el círculo.

Con la ayuda del papel colocar sobre el molde y unir a la pared de la tarta con un cordón grueso de masa. Retirar algunos cuadraditos de la parte superior, permitirán la salida del vapor durante la cocción y nos darán un aire decorativo.

Hornear durante una hora a 180º.