Brazo de chocolate y cerezas

Siguiendo las directrices de la banda de los Asaltablogs este mes hemos visitado la cocina de El toque de Belén. "Visitado" es un eufemismo, la hemos puesto patas arriba buscando un buen botín, y al encontrar las cerezas se acabó la búsqueda. Este sugerente postre, que se come frío y no necesita horno, se vino encantado con nosotros.

Con la misma forma y esencia y un pequeño cambio en el relleno, una mousse de chocolate que va perfecta con las cerezas, ha sido un buen descubrimiento. Una utilidad más de estos populares bizcochos de soletilla o savoiardi (su nombre original).

Ingredientes

• 16 bizcochos de soletilla (savoiardi)
• 500 g de cerezas
• 200 ml de leche
• 30 ml de licor de nueces

Para la mousse de chocolate

• 275 g de chocolate
• 200 ml de nata líquida
• 1 yema de huevo
• 10 g de azúcar

Preparación

Los bizcochos

En un recipiente adecuado mezclar la leche y el licor de nueces. 

Remojar los bizcochos por ambas caras e ir colocándolos, uno al lado del otro formando dos filas, sobre una hoja de papel de horno. Cubrir con otra hoja y reservar en la nevera para que enfrie durante aproximadamente una hora.

La mousse de chocolate

Colocar en un bol la yema y el azúcar, con unas varillas batir hasta que la mezcla blanquee. Sin dejar de remover vierta poco a poco la leche, que hemos calentado previamente, sobre la mezcla. Volver a ponerla en el cazo y cocerla a fuego lento sin que sobrepase los 82º. Retirar del fuego y dejar atemperar un poco.

Trocear el chocolate y ponerlo en un bol. Verter encima la crema inglesa que hemos preparado e ir removiendo con una espátula para que se vaya fundiendo y se integre con la crema.

Montar la nata con las varillas hasta que tenga una textura semimontada. Incorporar en dos veces a la crema de chocolate e ir integrando con movimientos envolventes de la espátula. Reservar en la nevera para que tome consistencia.

El brazo

Quitar el hueso a las cerezas, con un deshuesador o bien presionado el hueso con algún objeto tubular de pequeño diámetro (0,5 cm) - por ejemplo la funda de un bolígrafo tipo bic -. Necesitaremos más o menos cerezas en función de su tamaño: si son pequeñas podremos poner hasta tres filas, si son más gruesas con dos filas será suficiente, si no el brazo no cerrará.

Sacar la plancha de bizcochos de la nevera y retirar el papel de horno de la parte superior. Extender una capa de la mousse de chocolate por toda la superficie.

Colocar en el centro una hilera de las cerezas deshuesadas y una o dos más en función de su tamaño. En nuestro caso como eran gruesas, la "segunda" fila la hemos cortado por la mitad y hemos puesto un trozo en cada lado.

Levantar por ambos lados el papel de horno sobre el que descansan los bizcochos, de manera que estos se vayan plegando sobre si mismos, formen un rollo y se unan por el centro. Sin retirar el papel, reservar en la nevera hasta la hora de servir para que mantenga la forma y la consistencia al enfriarse.

Antes de servir, colocar en una bandeja y retirar con cuidado el papel. Acabar la decoración con otra fila exterior de cerezas y espolvorear con azúcar glass.

En este "golpe" de El Asaltablogs un nuevo blog desmantelado, esta vez El toque de Belén.