La salsa de pimienta verde, que fue uno de los grandes éxitos de finales del siglo XX, vive hoy una etapa casi de olvido, ausente de la carta de la mayoría de restaurantes. Recuperamos hoy una vieja receta familiar en este pequeño homenaje, donde acompaña a la perfección a un solomillo de ternera y a unas aromáticas patatas rústicas.
Ingredientes
- 2 trozos de solomillo de ternera
- 1 cucharada sopera de pimienta verde
- 2 chalotas
- 1 copita de cognac
- 200 ml de crema de leche
- 1/2 cucharadita de concentrado de caldo de carne
- sal
- aceite de oliva
Para las patatas rústicas
- 2 patatas grandes
- tomillo
- romero
- 3 dientes de ajo
- sal, pimienta negra
- aceite de oliva
Preparación
Las patatas rústicas
Lavar y limpiar bien las patatas, vamos a cocinarlas con piel y no deben quedar restos de tierra. Cortarlas en gajos longitudinales.
Precalentar el horno a 200º.
Se preparan en dos cocciones. Una primera para cocerlas, que puede ser la tradicional de hervirlas en una cazuela con agua o alguna variante que ofrezca el mismo resultado final. Nosotros hemos optado por cocerlas al vapor en microondas, es más rápido, se conservan más enteras y no pierden nutrientes en el agua. Colocar las patatas en una vaporera para microondas y cocer, a máxima potencia (900W), durante 5 minutos. Con cuidado removerlas un poco y cocer 2 minutos más. Sacar del microondas y dejar reposar un par de minutos más.
Colocarlas en una bandeja de horno y aderezarlas al gusto. Estas llevan romero, tomillo, sal, pimienta negra, unos dientes de ajo machacados y aceite de oliva. Mezclar bien las patatas con estos ingredientes para que se impregnen bien de sus sabores.
La segunda cocción es en el horno, para que se acaben de hacer y queden doradas y crujientes. Cocer a 200º durante 15 o 20 minutos, vigilando al final para que no se quemen. Retirar y reservar.
La salsa de pimienta verde
Preparar los ingredientes para tenerlos a mano.
Pelar y picar, muy finas, las chalotas. Machacar unos cuantos granos de pimienta verde, potenciará el sabor final de la salsa.
Colocar un cazo al fuego y calentar unas tres cucharadas de aceite de oliva. Añadir las chalotas y un poco de sal y dejar pochar un par de minutos. Poner la pimienta verde, dejar cocer un minuto.
Añadir la copita de cognac. Dejar que evapore el alcohol ( 2 o 3 minutos son suficientes). Incorporar la crema de leche y mezclar. Por último añadir media cucharadita de concentrado de caldo de carne. (Este ingrediente para mi gusto es opcional, también queda muy bien si no se añade).
Remover bien todos los ingredientes y mantener la cocción hasta que la salsa empiece a espesar. Retirar del fuego y reservar. Si no la vamos a utilizar de inmediato mejor colocar en una salsera y cubrir la superficie con papel film, para evitar que forme costra al resecarse.
La carne ... y a emplatar
Calentar a fuego fuerte una plancha o parrilla. Untar los filetes con aceite de oliva y colocar sobre la parrilla. El punto de cocción de la carne es personal. En casa se hacen al punto, se marcan por ambos lados pero el interior queda rosado. El resultado es una carne tierna y jugosa. Sazonar al gusto.
Pueden utilizarse otros cortes de ternera, buey y también cerdo.
Colocar la carne en el plato y cubrir una parte con un par o tres de cucharadas de la salsa de pimienta verde. Completar con las patatas rústicas que hemos horneado y ... buen provecho!
Si te gustan los platos de carne no dejes de pasarte por aquí:
Ais, a mi la salsa de pimienta no me va mucho, pero las patatas rústicas me pierden, nunca sé cuando dejar de comer... Bueno, sí, cuando se acaban jejeje
ResponderEliminarTe ha quedado un plato completo y que se prepara en un plis plas, ideal para el fin de semana :)
Un beso.
No soc gaire de carn pero aquest filet te molt bona pinta... M'encanta el plat.
ResponderEliminarpetons