La cocción a la sal es una técnica muy antigua, propia de las zonas en las que abundan las salinas marinas, y por tanto muy común en el Mediterráneo. Es un método de cocción sano e ideal en dietas ligeras: los alimentos se cocinan en su propio jugo, sin grasas añadidas, sin pérdida de nutrientes, conservando así todo su sabor.
Por efecto del calor del horno la sal crea una costra que protege los alimentos, absorve las grasas que desprenden y les transmite su aroma yodado y un ligero sazonamiento, obteniéndose como resultado un plato jugoso, sabroso y ligero.
Hemos utilizado esta técnica de cocción con un besugo, pero se puede hacer con otros pescados como dorada, lubina, pargo, sardinas, salmonetes, ... y tambíén carnes, aves y verduras.
Vereis que es fácil y rápido de preparar y los resultados son espectaculares.Ingredientes
- 1 besugo ( 700 gr aprox. para 2 personas)
- 2 kg de sal marina gruesa
- salvia
- perejil
- tomillo
- 1 limón (ralladura de la piel)
- Agua
Preparación
Al comprar el besugo indicar que es para cocinar a la sal, no hay que quitarle las escamas y se limpia de vísceras por un corte pequeño a la altura de las agallas. La piel y las escamas protegeran el pescado del contacto directo con la sal.
Precalentar el horno a 200º.
Lavar las hierbas y el limón. Picar la salvia, el perejil y el tomillo (si es fresco), y rallar la piel del limón.
Disponer la sal en un bol, añadirle el aderezo y un poco de agua para humedecer la mezcla, remover.
Colocar en el fondo de una bandeja para el horno, una capa de sal (no es necesario que sea muy gruesa). Poner encima el besugo y cubrirlo con el resto del sal, presionando un poco de forma que quede bien sellado y solo se vea la punta de la cola.
Introducir en el horno y cocer a 200º unos 20 minutos aproximadamente. Pasado este tiempo observaremos como la sal se ha endurecido y ha formado una costra: ya está listo para sacarlo.
Sin dejar enfriar, con la ayuda de un cuchillo o espátula rígida, cortar la costra de sal por los bordes exteriores de la silueta del pescado y retirar, normalmente sale de una sola pieza.
El pescado queda tierno y jugoso y nada salado. Podemos acompañarlo de verduras, patatas al vapor, ensalada, ... y alguna salsa. En esta ocasión hemos completado el plato con unos calçots asados al horno y salsa romesco.
Hace tiempo que vengo pensando el hacer un pescado a la sal. A ver si me animo un día de estos porque tu besugo se ve súper tierno y jugoso!
ResponderEliminarTiene una pinta impresionante este besugo... y aunque sí que he probado pescados cocinados de esta forma, nunca los he preparado yo misma. Debe ser un lujo poder disfrutar de un plato tan rico es casita. Un besito
ResponderEliminarQue rico Pilar ,me consta que así es como mejor está el pescado sale rico y muy jugoso, ya hace tiempo que no lo preparo así que al recordarmelo cae pronto seguro......besos
ResponderEliminarEs una técnica a la que le tengo ganas, pero me da un poco de respeto. Como veo que te ha salido muy bien, me llevo la receta al pie de la letra para ver lo que me sale, aunque tendrá que ser con otro pescado porque por aquí el besugo no se ve en las pescaderías.
ResponderEliminarBesinos
No he cocinado nunca a la sal... y a parte de sencilla tiene que quedar un pescado riquísimo, verdad? me lo apunto para hacerlo ya de una vez! Un abrazo!
ResponderEliminarDelicia de besugo, Pilar!
ResponderEliminarTe ha quedado verdaderamente estupendo!
Un beso grande y feliz semana
Me encantan los pescados a la sal ,pero nunca probé con un besugo, ósea que lo pongo en pendientes por que tiene que tener un sabor espectacular.
ResponderEliminarBesos cris y Laura.