La cocción a la sal es una técnica muy antigua, propia de las zonas en las que abundan las salinas marinas, y por tanto muy común en el Mediterráneo. Es un método de cocción sano e ideal en dietas ligeras: los alimentos se cocinan en su propio jugo, sin grasas añadidas, sin pérdida de nutrientes, conservando así todo su sabor.
Por efecto del calor del horno la sal crea una costra que protege los alimentos, absorve las grasas que desprenden y les transmite su aroma yodado y un ligero sazonamiento, obteniéndose como resultado un plato jugoso, sabroso y ligero.
Hemos utilizado esta técnica de cocción con un besugo, pero se puede hacer con otros pescados como dorada, lubina, pargo, sardinas, salmonetes, ... y tambíén carnes, aves y verduras.
Vereis que es fácil y rápido de preparar y los resultados son espectaculares.