Tradicional pastel de origen
francés el milhojas consiste en unas capas de hojaldre, normalmente
tres, que se alternan con algun tipo de crema. Por exigencias del guión
el hojaldre que hemos utilizado es el que se denomina invertido, que se
caracteriza porque la masa grasa, que habitualmente queda en el
interior, se sitúa aquí en el exterior.
Las
posibilades de personalizar el milhojas pasan pues por la forma, la
crema y el acabado final. Para tan gran ocasión nos hemos decantado por
raciones individuales de forma cuadrada, una crema de trufa para el
relleno y una capa final de frambuesas coronando el pastel. Es una
preparación laboriosa pero el resultado final merece la pena, te comes
hasta las miguitas.
Aprovecho para agradecer a Patricia (El Trasgu de las galletas) sus acertados consejos para la elaboración de la masa.
Ingredientes
Para el hojaldre invertido (1 kg de masa)
Para el plastón
- 252 gr de harina floja
- 8 gr de sal
- 140 gr de agua
- 360 gr de mantequilla (82% MG)
- 240 gr de harina de fuerza
Para la trufa
- 1 l nata para montar 35% M.G.
- 300 gr de chocolate negro
- 100 gr de azúcar
- 2 c/s de cacao puro en polvo
- 2 c/s de licor al gusto (opcional)
Preparación
El hojaldre invertido
El día anterior mezclar la mantequilla con la harina de fuerza, hasta conseguir que sea una pasta homogénea, sin pegotes de mantequilla. Formar un bloque de unos dos centímetros de grosor, envolver en film plástico, y guardar en la nevera para que enfríe.
El día de la preparación, hacer el plastón, mezclando la harina floja con la sal y el agua. Amasar el tiempo suficiente para conseguir una masa fina, que forme una membrana al estirarse. Reservar en la nevera envuelta en film para que no se reseque la superficie.
Recuperar la masa grasa y estirarla en la superficie de trabajo, formando un rectángulo el doble de largo que de ancho. Dividir visualmente en tres partes.
Dividir el plastón en dos partes iguales.
En
la parte del centro de la masa grasa colocamos la primera y con ayuda
de las manos la estiramos formando un rectángulo de tamaño similar a la
parte en que la vamos a poner. Tapamos con una de las mitades libres.
Encima de ese pliegue colocamos la otra parte del plastón de igual
forma, y tapamos con la parte que queda. Hemos completado el primer
plegado.
Hay que procurar trabajar rápido para que la masa conserve el frío y no se caliente. Si vemos que esto ocurre, colocarla un rato en la nevera para que enfríe. Enharinar ligeramente la superficie de trabajo para que no se pegue la masa, o colocarla entre dos hojas de film.
Estirar la masa con la ayuda de un rodillo, hasta volver a formar un rectángulo como el inicial, doble largo que ancho. Visualizar las tres partes y doblar los extremos sobre el centro, primero uno y después el otro. Completado el segundo plegado.
Repetir la operación estirar / plegar dos veces más, se habrán completado cuatro plegados.
Finalizamos estirando otra vez la masa, pero esta vez hacemos un único pliegue por la mitad.
Ya tenemos la masa lista para formar las piezas del milhojas. Coger la masa que se vaya a utilizar, en nuestro caso la mitad. El resto a congelar y para otra ocasión.
Con la ayuda del rodillo vamos estirando la masa hasta conseguir una lámina fina, de unos 2 o 3 mm. Enharinar muy ligeramente la superficie de la masa y espolvorearla con azúcar, pasar el rodillo por encima para que el azúcar se pegue. Dar la vuelta y repetir la operación por la otra cara. El azúcar se añade para que el hojaldre caramelice cuando se cuece en el horno.
Precalentar el horno a 180º.
El último paso es cortar las piezas de hojaldre antes de hornearlas. Se necesitan tres piezas para un milhojas, por tanto en función de lo que queramos hacer hay que calcular las medidas. Nosotros hemos hecho cuatro individuales, por tanto hemos cortado doce piezas a partir de un molde cuadrado.
Forrar una bandeja con papel de horno y disponer los trozos de masa por encima. Cubrir con un peso ligero y uniforme para que al hornear el hojaldre no crezca demasiado. Nosotros hemos colocado una lámina de silicona, puede servir también una rejilla o algo parecido.
Introducir la bandeja en el horno y cocer unos 15 minutos. Retirar la lámina y hornear unos cinco minutos más, vigilando que tomen color pero no se quemen. Sacar del horno y dejar enfriar.
La trufa
Poner la nata y el azúcar en un cazo al fuego, cuando empiece a hervir incorporar el chocolate, el cacao y si es el caso el licor, remover hasta que esté bien ligado con la nata, retirar del fuego y dejar enfriar.
El día anterior mezclar la mantequilla con la harina de fuerza, hasta conseguir que sea una pasta homogénea, sin pegotes de mantequilla. Formar un bloque de unos dos centímetros de grosor, envolver en film plástico, y guardar en la nevera para que enfríe.
El día de la preparación, hacer el plastón, mezclando la harina floja con la sal y el agua. Amasar el tiempo suficiente para conseguir una masa fina, que forme una membrana al estirarse. Reservar en la nevera envuelta en film para que no se reseque la superficie.
Recuperar la masa grasa y estirarla en la superficie de trabajo, formando un rectángulo el doble de largo que de ancho. Dividir visualmente en tres partes.
Dividir el plastón en dos partes iguales.
Hay que procurar trabajar rápido para que la masa conserve el frío y no se caliente. Si vemos que esto ocurre, colocarla un rato en la nevera para que enfríe. Enharinar ligeramente la superficie de trabajo para que no se pegue la masa, o colocarla entre dos hojas de film.
Estirar la masa con la ayuda de un rodillo, hasta volver a formar un rectángulo como el inicial, doble largo que ancho. Visualizar las tres partes y doblar los extremos sobre el centro, primero uno y después el otro. Completado el segundo plegado.
Repetir la operación estirar / plegar dos veces más, se habrán completado cuatro plegados.
Finalizamos estirando otra vez la masa, pero esta vez hacemos un único pliegue por la mitad.
Ya tenemos la masa lista para formar las piezas del milhojas. Coger la masa que se vaya a utilizar, en nuestro caso la mitad. El resto a congelar y para otra ocasión.
Con la ayuda del rodillo vamos estirando la masa hasta conseguir una lámina fina, de unos 2 o 3 mm. Enharinar muy ligeramente la superficie de la masa y espolvorearla con azúcar, pasar el rodillo por encima para que el azúcar se pegue. Dar la vuelta y repetir la operación por la otra cara. El azúcar se añade para que el hojaldre caramelice cuando se cuece en el horno.
Precalentar el horno a 180º.
El último paso es cortar las piezas de hojaldre antes de hornearlas. Se necesitan tres piezas para un milhojas, por tanto en función de lo que queramos hacer hay que calcular las medidas. Nosotros hemos hecho cuatro individuales, por tanto hemos cortado doce piezas a partir de un molde cuadrado.
Forrar una bandeja con papel de horno y disponer los trozos de masa por encima. Cubrir con un peso ligero y uniforme para que al hornear el hojaldre no crezca demasiado. Nosotros hemos colocado una lámina de silicona, puede servir también una rejilla o algo parecido.
Introducir la bandeja en el horno y cocer unos 15 minutos. Retirar la lámina y hornear unos cinco minutos más, vigilando que tomen color pero no se quemen. Sacar del horno y dejar enfriar.
La trufa
Poner la nata y el azúcar en un cazo al fuego, cuando empiece a hervir incorporar el chocolate, el cacao y si es el caso el licor, remover hasta que esté bien ligado con la nata, retirar del fuego y dejar enfriar.
Una
vez a temperatura ambiente meterla en la nevera un mínimo de 5 horas
para que esté bien fría, aunque mejor de un día para otro.
Pasado el tiempo montar la crema con ayuda de unas varillas hasta conseguir la consistencia deseada.
Es muy importante que la crema esté muy fría para obtener una trufa espesa y consistente, por eso, es mejor preparar la crema el día anterior y guardarla en la nevera en el mismo recipiente donde la batiremos para que este todo bien frío a la hora de montarla.
Si
cuando la montamos nos pasamos y queda grumosa, con aspecto de cortada,
añadir un chorrito de crema de leche (fría) y batir suavemente hasta
recuperar la textura deseada. La cantidad de crema de leche puede variar
dependiendo de la textura a corregir, así que es mejor ir añadiendo
poca cantidad, batir seguidamente y si es necesario ir repitiendo el
proceso pero con cantidades mínimas de crema de leche para no
pasarnos.
Podemos
aromatizar con algún licor a nuestro gusto o dependiendo del postre
final al que va destinada la trufa, para ello no añadir más de 2 c/s de
licor por cada litro de nata, con esto será suficiente.
Si
sobra trufa congela estupendamente, antes de volverla a utilizar dejar
descongelar en la nevera y batir ligeramente para recuperar la textura.
El montaje
Disponer la trufa en la manga pastelera con una boquilla circular.
Colocar
una base de hojaldre y poner una capa de trufa. Cubrir con otra lámina
de hojaldre y otra capa de trufa. Colocar la última pieza de hojaldre
cubierta de una capa fina de trufa, y sobre ésta repartir las
frambuesas. Espolvorear con azúcar glaseado y ya tenemos listo el
milhojas.
Quina delícia!! I has fet la massa i tot tu? Això sí que és difícil. Aquestes postres no tenen rival! Delicioses, i molt elaborades.
ResponderEliminarPero qué cosa más buena, leñe! ^o^
ResponderEliminarBss
*Con Especias
Espectacular, tant la pasta de full com el pas a pas, ara ja no tenim excusa per fer-ho a casa!
ResponderEliminarPetons!
Pero que bien te ha quedado!!! Me gusta mucho la combinación de frambuesas y chocolate. Así que para mi tus milhojas son perfectas, combinan unos ingredientes que me encantan..
ResponderEliminarBesitos,
Estupendo milhojas, qué presentación más cuidada y qué paso a paso tan excepcional!. Con la combinación frambuesa-chocolate el éxito está asegurado.
ResponderEliminarUna presentación preciosa!! Es verdad que hacer el hojaldre casero da trabajo, pero su sabor bien merece la pena. Bss.
ResponderEliminarGenial esta entrada, te han quedado los milhojas preciosos, la trufa con el toque de las frambuesas está riquísimo.
ResponderEliminarEl año pasado hicimos algo parecido en Navidad y triunfó,
un abrazo
Muy rica la combinación!
ResponderEliminarPedazo milhojas, más rico imposible mmm guardame uno o dos... que voy para allá con el café
ResponderEliminarBesos
Me encanta la combinación. Y es que las milhojas me pierden...Tienen una pinta estupenda =)
ResponderEliminarAcabo de conocerte gracias al asaltablogs y me quedo por aquí, con tu permiso.
Un besote!^^
maravillosa milhojas! un espectáculo de presentación,aunque yo no me animo a preparar el hojaldre,me he visto la explicación tres veces!....un beso
ResponderEliminarOhhh que elegant queda!!! T'ha quedat una presentació perfecta! Petons
ResponderEliminarque pinta tiene!!!!
ResponderEliminarAcabamos de llegar a tu blog y ya nos hacemos seguidoras con este receta de milhojas nos as conquistado ,esperamos que te hagas seguidora nuestra y que alguna receta te conquiste, seguiremos mirando con calma.
ResponderEliminarEl milhojas impresionante no tiene otra definición y la explicación fabulosa.
Besos cris y laura
Como siempre, ¡ sublime!. Tus presentaciones son espectaculares y has nacido no sólo para cocinar como los ángeles, sino para enseñarnos de forma clara y sencilla cómo hacerlo.Aunque como soy diabética y me muero de envidia probaré a hacer la trufa con edulcorante. No sé si funcionará. De todas formas gracias por compartir tu sabiduría con los pobres mortales. Un beso. Por si aparezco como anónimo me llamo Amaia.
ResponderEliminar