Espinacas salteadas con huevo poché

Esta es una de nuestras cenas preferidas: sencilla, rápida de hacer, completa y sana. Toda una joya, más en estas épocas que apetecen cosas ligeras y equilibradas. Las espinacas, salteadas con ajo, pasas y piñones, como manda la tradición, adquieren una textura crujiente, potencian su color esmeralda y mantienen todas sus propiedades nutritivas. Y el huevo poché es una alternativa más ligera a otras preparaciones, sin renunciar a la cremosidad de la yema ("per sucar-hi pa"), ni a una clara jugosa.

Ingredientes

Para 2 raciones

• 300 gr de espinacas
• 2 huevos
• 2 dientes de ajo
• pasas
• piñones
• sal
• pimienta
• AOVE

 

Preparación

Preparar los huevos para cocerlos, cortar 2 láminas grandes de papel film y untarlas con unas gotas de aceite ayudándonos de un pincel.

Poner un cazo con abundante agua a hervir.

Colocar una lámina dentro de un bol de manera que quede totalmente cubierto, cascar el huevo y colocarlo sobre la lámina, dentro del bol. Recoger las puntas de la lámina y cerrarlas sobre si mismas haciendo un atadillo con la ayuda de hilo de cocina, de manera que no se escape el huevo. Preparar el resto de los huevos de la misma manera y reservar.

Picar los dientes de ajo.

Poner una sartén grande al fuego con un poco de aceite y tirar los piñones, cuando estos empiecen a dorarse, añadir los ajos picados y las pasas . Cuando estas se hinchen, añadir las espinacas.

Ir dando vueltas hasta que todo este cocido. Apartar del fuego. 

Cuando el agua hierva, poner el fuego a potencia media y colocar todos los huevos dentro del agua. Cuando vuelva a hervir contar 3 minutos y retirar el cazo del fuego. sacar los paquetitos del agua, cortar la cocción con agua fría  y reservar sobre un plato.

Servir las espinacas con el huevo poche encima, al que habremos quitado con mucho cuidado el plástico. Salpimentar al gusto.

Acompañar de tiras de pan tostado.