Torta de espinacas

Esta receta que os presentamos hoy, esta inspirada en la Torta Pascualina de Aisha Kandisha, con alguna que otra aportación, unas conscientes y otras no tanto.

En casa las espinacas las hacemos casi siempre con ajo, pasas y piñones, salteadas y con un huevo "escaldado" encima, así que manteniendo esta costumbre me puse manos a la obra, pero al coger la harina, me equivoqué y en lugar de una pasta blanquita salio con "pecas", la verdad es que es lo de menos. Para rematar olvidé pintarla con huevo y ha quedado un poco seria, parece cruda!!!!

Lo de los huevos, os cuento, como somos dos, pues si ponía 4 me parecían muchos, y se pegarían entre sí, convirtiéndose en una torta de huevos, así que pensé que para que quedaran más repartidos podrían ser pequeños (de codorniz) y quieras que no si nos la comíamos de una sentada, como así fue, no seria tan grave digo yo !

Y nada más os dejo con mi versión, por favor pintarla de huevo en vuestra mente, que quedo buenísima, la foto no le hace justicia.

Ingredientes:

Masa

• 200 gr de harina (espelta semi-integral)
• 1 huevo
• 30 gr AOVE
• sal
• 3 c/s de agua fría

Relleno

• 400 gr de espinacas
• 1 cebolla pequeña
• 1 diente de ajo
• pasas
• piñones
• 70 gr de queso Idiazabal
• 7 huevos de codorniz
• sal
• AOVE

 Preparación:

La masa

Pesar y preparar todos los ingredientes, tener a punto un vaso con agua fría y cubitos de hielo.
Tamizar la harina con la sal en el bol, incorporar el aceite y el huevo. Mezclar hasta que obtengamos una textura arenosa, pueden quedar bolitas del tamaño de una lenteja más o menos, es igual si no queda homogénea, entonces paramos de mezclar y añadimos el agua, de cucharada en cucharada, no incorporamos una nueva hasta que se mezcla totalmente la anterior, depende del tipo de harina puede que necesitemos más o menos, la masa estará hecha cuando este totalmente ligada, más bien seca, pero manejable.

Haremos una bola, la taparemos con film transparente y dejaremos que se enfríe en la nevera, como mínimo 20-30 minutos, antes de estirarla.

Dividir la bola en dos partes, una para la base y otra para la tapa. 

Para estirarla el mejor método es ponerla entre dos hoja de papel film y aplanarla con el rodillo, de este modo  impedimos que se nos pegue a éste.

Una vez estirada, forrar el molde escogido con la masa. Dejar los bordes sin recortar , para poder sellar la junta con  la tapa.
Estirar la otra mitad, que haremos servir para tapar la tarta una vez rellena y reservar cubierta con papel film.

El relleno

Poner en remojo con agua las pasas, lavar y trocear las espinacas, picar la cebolla y el ajo, muy menudos y rallar el queso.

Precalentar el horno a 200º.

En una cazuela poner a calentar un poco de aceite para pochar la cebolla y el ajo. Cuando la cebolla esté transparente, añadiremos las pasas escurridas y los piñones, dejaremos tostar unos minutos, removiendo y vigilando que no se tuesten demasiado.

Añadir las espinacas y dejar cocer hasta que estén tiernas, remover de vez en cuando. Mezclar las espinacas con el queso y salpimentar al gusto. Retirar del fuego y reservar.

Rellenar la tarta con la mezcla, hacer 6 hoyos en las espinacas formando un círculo y otro en el centro, en estos hoyos colocaremos los huevos (sin cáscara) de codorniz. 

Taparemos la tarta con la masa que teníamos preparada para este fin, sellaremos los bordes y pincharemos la masa con mucho cuidado, para que salgan los vapores a la hora de cocer en el horno. con los restos de pasta podemos decorar la tarta por encima.

Pintar la superficie con huevo batido ( se me olvidó... ), no afecta para nada al sabor, pero si queda más vistosa.

Poner la tarta a cocer en el horno a 200º durante 15-20 minutos, comprobar la cocción de vez en cuando, y si es necesario alargar el tiempo.