Crema de lentejas con albóndigas vegetales y crujiente de morcilla

Propuesta del mes en La receta del quince: lentejas. Ya sabes, si quieres las tomas y si no las dejas... Para no hacer las típicas estofadas, le hemos dado una vuelta y os presentamos un plato que combina dos preparaciones de tan socorrida legumbre: una crema y unas hamburguesas vegetales reconvertidas en albondiguillas, coronadas con crujiente de morcilla de cebolla para los nostálgicos del colesterol.

Ingredientes

Para la crema de lentejas

• 500 gr. de lentejas cocidas
• 1 puerro (parte blanca)
• 1 litro de caldo (el de hervir las lentejas)
• 1 c/c pimentón
• comino
• 1 pastilla de caldo de verduras

Para las albóndigas

• 100 gr. de lentejas cocidas
• 100 gr. de arroz cocido
• 1 cebolla pequeña
• Berenjena
• Pimiento verde 
• Pimiento rojo
• Zanahoria

Para el crujiente

• 1 morcilla de cebolla

Preparación

Poner en remojo las lentejas la noche anterior. Cocerlas con agua,  agregando un ajo entero y una hoja de laurel. Escurrirlas y reservar el caldo.
Calentar un poco de aceite en una cazuela y pochar el puerro picado. Añadir las lentejas, los condimentos y el caldo, y dejar que coja temperatura unos minutos para que se integren los sabores. Triturar con la batidora o similar lo más fino posible, y pasar por un colador para eliminar pieles y fibras. Rectificar con caldo la textura de la crema deseada, este es un tema de gustos: más líquida o más espesa. Ya tenemos la crema!
Para las albóndigas, cocer las lentejas y el arroz y dejar enfriar.
Cortar y picar fino el resto de las verduras y, en una sartén con un poco de aceite, saltearlas ligeramente. Condimentarlas al gusto. Dejar enfriar y mezclar con las lentejas y el arroz hasta obtener una pasta homogénea. Formar pequeñas bolitas y reservar. Albóndigas listas!
Para preparar el crujiente de morcilla, cortarla en rodajas muy finas. Precalentar el horno.
Colocar las lonchas entre dos hojas de papel de horno. Ponerlas en una bandeja y colocar otra encima para que haya presión. Hornear a 250º unos ocho minutos aproximadamente, tienen que quedar crujientes, pero no carbonizadas.
Para montar el plato, colocar en el centro unas cuantas albóndigas, añadir la crema y decorar con el crujiente de morcilla. Espero que si la probáis os guste.